miércoles, 19 de junio de 2013

Vejaciones del Maestro Juan de Ávila

El caso de acoso escolar sucedido en el instituto Juan de Ávila de Ciudad Real trataba de una niña ecuatoriana de 15 años, llamada Mónica, la cual era insultada, agredida y obligada a ir de pie en el autobús debido a que sus compañeros no le dejaban sentarse. Los padres habían pedido el cambio de centro para Mónica pero un informe del orientador del instituto lo desaconsejaba por entender que no había motivos para ello. Y finalmente, la niña se suicidó. 

Esto nos debería hacer reflexionar, darle la importancia que se merece este tema y evitarlo. Muchas veces he oído la expresión “es cosa de niños”, como si eso le quitase miga al asunto o lo hiciese menos duro. Hay niños que son muy crueles y no podemos dejarnos llevar por esa imagen de que los niños son inocentes, dejemos todas esas ideas y empecemos a ser conscientes de que es un gran problema en la sociedad. 

Supongo que la mayoría, somos un poco el reflejo de lo que hemos vivido en nuestro hogar desde pequeños, lo que hemos oído y lo que nos han inculcado nuestros padres. Nuestra forma de actuar y si sabemos canalizar positivamente la sensibilidad, porque no es tan fácil como parece, a veces un niño violento es cruel porque tiene una personalidad maligna pero no todos los casos son así, hay niños que encuentran la violencia como única manera para dejar salir esa sensibilidad, tapándola con una máscara que los hace parecer fuertes y seguros ante los demás y ocultar algo que les afecta, como un padre alcohólico, maltratador, etc.. Una de las características principales de todos los humanos es nuestra capacidad de imitación, la mayor parte de nuestro comportamiento lo copiamos de los demás... Por eso es tan importante el ejemplo que damos a nuestros educadores , es casi seguro que en la mayoría de los casos nos tratarán tal como se vean tratados” , Los malos tratan a los demás como enemigos en lugar de buscar su amistad, lo hacen por miedo, soledad o por ser tratados sin amor ni respeto.

Con esto no justifico el comportamiento equivocado del acosador, como he dicho antes, no hay nada que pueda justificarlo, pero sí nos puede hacer entender, que el acoso escolar se produce en una edad de maduración y aprendizaje, y la presencia, actitud, enseñanza y ejemplo que muestren de los padres y profesores en estos casos es muy importante. 


Debemos hacer que se den cuenta del gran problema que es antes de que sea demasiado tarde, debemos conseguir que se den cuenta de las consecuencias que tiene todo ello antes de que llegue el remordimiento por ser conscientes de lo que hicieron mal y no tenga vuelta atrás. 

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